Las impresoras 3D siguen haciendo noticia, y es que cada día se encuentran más aplicaciones para este novedoso aparato. Lo último que se ha creado con este dispositivo es una prótesis mecánica, que se espera pueda ayudar a muchos niños con pérdida de miembros.
Esta prótesis fue elaborada por Richard van AS, un carpintero que sufrió la pérdida de cuatro dedos en un accidente de trabajo en el año 2011, luego del accidente se vio en la necesidad de adquirir un reemplazo para los miembros perdidos, grande fue la sorpresa al darse con una dura realidad: este tipo de aditamentos no están al alcance de todos.
Es a raíz de este acontecimiento que, mediante una impresora 3D, se aventura en el trabajo de crear, con sus propios recursos, las partes que se llevó el trágico accidente. La tarea no fue nada fácil pues fracasó varías veces, es en ese momento que decide introducir en el proceso de creación la impresora, con ello consiguió realizar de forma precisa los dedos que le hacían falta, y fueron tan precisos que hasta pudo tomar una moneda sin problemas.
Después del satisfactorio resultado van As, de la mano con unos amigos, decidió hacer las prótesis para niños de escasos recursos. Con el nombre de Robohand, esta prótesis esta ensamblada con cables elásticos, lo que permite el control del dispositivo mediante el brazo y la muñeca.
Se sabe que los planos para su impresión se encuentran en su web para descargarse de forma gratuita, a través de esta página también podrán ayudar a recaudar fondos para ayudar a los niños de Sudáfrica, con esto se demuestra que la impresora 3D no solo será usada por la NASA, su características hacen que en el campo de la medicina también tenga un espacio.
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